Tres semanas en Camboya dieron para mucho y bueno! Por supuesto también habíamos tenido nuestros días duros, sobre todo en Phnom Penh, pero tras nuestras tres noches en Koh Rong ya teníamos de nuevo las pilas cargadas. Así, con fuerzas renovadas, nos despedíamos del país para mudarnos a… Vietnam!
El viaje en bus es bastante curioso. Primero vuelves a Phnom Penh para allí hacer transbordo y continuar hasta la frontera. Antes de subir al segundo bus le das el pasaporte al conductor, para que verifique si tienes el visado vietnamita en orden. Luz verde, podemos continuar la ruta. Este bus nos dejará en Ho Chi Minh City (HCMC, antiguamente llamada y más conocida como Saigon). Tras algunas horas de viaje, vemos como el bus se para en la orilla de un río y… se sube a un barco! Minutos después desembarcamos en la otra orilla y continuamos la marcha. Como si nada. Primer puesto fronterizo, nos devuelven los pasaportes. Tenemos que bajar para que nos vean la cara en el siguiente puesto de control. Le devolvemos el pasaporte al chofer. Subimos al bus. Avanzamos. Volvemos a bajar al poco rato. Los pasaportes van y vuelven sin necesidad de nuestra presencia y de repente,… ya tenemos los pasaportes con todos los cuños y en Viet Nam! Continuamos nuestro trayecto, nos espera la ciudad más grande del país!
En esta parte del final del trayecto, entablé conversación con el hombre que tenía al lado (o el la entabló conmigo, no estoy seguro). Tendría unos cincuenta años, era camboyano y hablaba muy buen inglés. Le pregunté si él ya vivía en los tiempos del Khmer Rouge. Y sí. A pesar de ser un niño, recordaba los tiempos de Pol Pot. No podía olvidar lo que le había hecho a su familia. No quise preguntar más sobre el pasado. Era médico, su sueño era salvar vidas. Sin embargo al terminar sus ocho años de estudios (entiendo que sería el mejor de su promoción porque su familia no podía pagarle los estudios), le destinaron a un pueblo en el campo para ejercer como tal, pero su salario era de risa (no recuerdo la cantidad exacta, pero menos de 100 USD/mes). Así que muy a su pesar tuvo que dejar su pasión para dedicarse a los negocios. A día de hoy es propietario de una empresa dedicada a la exportación de arroz, y parecía que le iba bien (o muy bien). Sus hijos podían ir a una escuela internacional privada, y si todo seguía así podrían ir también a una universidad del mismo nivel. Me pareció increíble comprobar de primera mano la capacidad de superación del ser humano. La miseria y penuria de sus primeros recuerdos contrastaba con la situación favorable que tanto él como su familia vivían gracias al sacrificio y el duro trabajo.
Llegamos de noche a HCMC. Según las indicaciones del hostel (el más barato que habíamos encontrado – 4 usd/noche/persona O_o), estaba a una distancia suficientemente corta para ir a pie. Lo encontramos. Estaba un poco apartado de la zona “backpackers”, pero por ese precio… qué més vols fill meu? Habíamos reservado algo nuevo para nosotros: cápsulas! Se trata de cajas de 2 metros de largo, 0,9 m de ancho y 1,2 de alto, con una sola cara abierta y una cortinita que te aislaba del mundo. Fue una grata sorpresa. La sensación de privacidad que tienes es total (allí en tu cueva con tu luz, tus enchufes y tu ventiladorcito), la habitación se aprovecha al máximo y se descansa fenomenal. Aunque mayor sorpresa fue cuando volvimos el segundo día y no estaban nuestras mochilas! La mujer que estaba en recepción nos dijo que la siguiéramos y nos llevó a una habitación privada, por el mismo precio y sin preguntar 😀 Se pensaría que estábamos de honey moon o algo, que sé yo… XDDD Molt be ché!
Una de los primeros shocks que te llevas al pasear por las calles de HCMC es el tráfico. Mucho más loco que en la mayoría de las ciudades que habíamos estado. Es como un mar de motos, los cruces son dinámicos (esto es, van en todas las direcciones… simultáneamente!), cuando vayas a cruzar, mejor mira a ambos lados (aunque parezca evidente que sólo “deben” venir de la izquierda), y sobre todo si empiezas a cruzar… no te pares. Si te paras, colapsarás el mundo. Los conductores necesitan visualizar tu trayectoria para adaptarse y esquivarte, pero si te paras,… la cagaste burlancaster! XDDD Y si no ves el momento de empezar la aventura de cruzar, siempre te quedara cerrar los ojos, rezar y avanzar a ritmo constante o, en caso de querer tener mayores probabilidades de sobrevivir, esperar a que alguien cruce “y ponerte al rebufo” 😀 Eso sí, cuidado porque los coches, camiones y buses no te esquivan! Así que si ves venir un coche, da igual que tengas el semáforo en verde y que tengas un paso de cebra bajo tus pies, los coches siempre tienen preferencia… apártate 😉 Los primeros días son de locos, pero al final te acostumbras y lo ves “tan normal”. Espero que cuando volvamos se me quite esta “normalidad”, o la policía me lo explicará en formato recetario…
Queríamos conocer la ciudad, y buscamos un free walking tour con tanta suerte que ese fin de semana era el primero que harían en 2015. Estaría un poco más “abarrotao” de lo normal, pero según las reviews valdría la pena. Y sinceramente, estuvo genial! Adam, un profesor inglés afincado en la ciudad desde hacía cuatro años se curró un paseo de tres horas en el que nos explicó tanto los monumentos y edificios principales de la ciudad, como su historia reciente, sobre todo la relacionada con los tiempos de la guerra contra los Estados Unidos.
Embarcando con el bus en un barco para cruzar el río! Que digo yo que quizá con un puente… XDDD
Aquí estamos en dentro de un bus encima de un barco, caminito de Vietnam
Desembarco y continuamos!
Llegamos de noche, pero las motos no duermen… que barbaridad!
Preparados, listos,…
yaaaaa! (nota bene: este es uno de los pocos semáforos respetados en la ciudad)
Pues parece que no era cuestión de hora punta. En cualquier momento y lugar,… motos por doquier!
No son papa noeles no… con escaleras de bambú, y tan alegremente pintando CASIO, a no sé cuantos metros de altura…
Estatua del pequeño Thánh Gióng. Nótese que no hay un sentido «obligatorio» en la rotonda

El ciclo (2+1 ruedas) es uno de los transportes comunes para turistas por el centro de la ciudad.
A pesar de la cantidad de gente, Adam hizo un trabajo fantástico!
En uno de los dos templos hindúes de la ciudad. Dicen que se parece a los de la India… quizá lo podamos comprobar en un futuro próximo :p
La guerra del Vietnam, fue la primera con cobertura televisiva, prácticamente «en directo» y «sin censura». Todos los días a las 5pm, se daban unos briefings para los periodistas en el Saigon’s Rex Hostel, definidos como «the longest-playing tragicomedy in Southeast Asia’s theater of the absurd». De ahí el nombre: five o’clock follies 😀
Vistas al teatro municipal de Ho Chi Minh City.
Pasado y presente en una misma foto. Aquí podéis ver el lugar desde donde se hizo la evacuación en helicóptero del personal de la CIA el día previo a la caída de Saigon.
Sorprende la inmensa cantidad de países que Ho Chi Minh recorrió en su juventud. Esta es una foto tomada por Adam de un panel que veríamos más tarde en el Museo de la Guerra en Hanoi.
Queriendo imitar el color original, se equivocaron y ahora es esta especie de limón. Foto «al natural» 😉
Posados frente al Post Office.
Mónica frente a la Basílica Notre-Dame Saigon, construida a finales del s.XIX en tiempos de la colonia francesa.
Este es un auténtico parque multiusos! Por las mañanas, antes de la jornada laboral, es fácil ver habitantes de la ciudad «sacando a pasear» sus pajaritos en sus jaulas. Por otro lado, en la sociedad vietnamita es tradición que las parejas de jóvenes no se vean en las casas, así que éste también es el lugar de encuentro de los futuros novios. Por último, los estudiantes aprovechan para conversar con turistas y mejorar su inglés. Esto es lo que se llama un lugar bien aprovechado!
Palacio de la Independencia, con su caída se daba por con concluida la guerra, y empezaba el proceso de reunificación del país. Desde el mismo lugar donde se toma esta foto, te giras 180º y…
… esto es lo que hay! Ho Chi Minh City en estado puro 😀
Jugo de caña con limón y hielo. Que refrescante y que ricoooo! Precio: 7k VND… o 0,30 Eur.
Al rico Nuoc Mia, que buenoooo!
Perritos buscan dueño
En este lugar en 1963, Thich Quang Duc, un conocido y respetado monje budista se prendió fuego a sí mismo como protesta por la persecución del gobierno de VIetnam del Sur hacia los budistas. «No news picture in history has generated so much emotion around the world as that one»
Monumento frente a la embajada camboyana. Última parada del free walking tour. Thanks Adam!
Aunque lo parezcan… no son gusanos no. Noodles formato gordo.
Ese Crespo pizzero ahí!
En este modesto lugar sirven los mejores y más económicos smoothies de la ciudad. Arriba esos Five Boys Number One!!
Pero no podíamos continuar nuestro viaje sin pasar por el War Remnant Museum y volver a comprobar en primera persona sus terribles efectos, su sinsentido, su crueldad,… A diferencia de Camboya, en este caso sí que hubo intervención exterior, pero no para salvar a su población sino para provocar la guerra.
Intentaré resumir la situación, aunque hay muchos actores, y seguro que algún dato importante se me pasa por alto. A finales del s.XIX, los territorios de Camboya, Vietnam y Laos formaban lo que se llamaba la Indochina Francesa (os acordaréis dónde empezó todo, cuando el francés Henri Mouhot descubrió Angkor Wat). Durante la Segunda Guerra Mundial, los alemanes derrotaron a los franceses y el estado francés se convirtió en un estado cliente de la Alemania nazi. Posteriormente las tropas japonesas invadieron Indochina, y tras el alto el fuego, las autoridades coloniales francesas colaboraron de manera que, aunque la última palabra la tenían los japoneses, ellos seguían dirigiendo los asuntos del día a día.
El Viet Minh, liderado por Ho Chi Minh, era un grupo formado para luchar por la independencia de Vietnam, primero contra los franceses y posteriormente contra Japón. ¿Sabéis quien apoyó a Ho Chi Minh y al Viet Minh en su lucha contra los japoneses? EEUU y el Partido Nacionalista Chino. Entre 1944 y 1945, hubo una gran hambruna en el país, debido a la combinación de mal tiempo y que los granos se exportaban a Japón. Entre cuatrocientas mil y dos millones de personas murieron de hambre… (casi nada!). Esta situación de desesperación hizo que el Viet Minh tuviera un gran apoyo popular y empezaron las revueltas.
En ese mismo año, Japón se rinde. Y aunque mantienen su presencia en Vietnam, grupos independentistas y el Viet Minh se hacen con los lugares públicos y Ho Chi Minh declara la independencia de la República Independiente de Vietnam en Hanoi. Sin embargo, EEUU, Inglaterra y los aliados afirman que toda la zona seguía perteneciendo a los franceses. Pero Francia no podía mantener el orden, así que Inglaterra mandó un contingente que controlaría el sur, y las fuerzas nacionalistas chinas entraron desde el norte.
Ho Chi Minh negocia con los franceses para que puedan remplazar a los nacionalistas chinos, en el norte, mientras que los británicos se vuelven dejando todo en mano de los franceses. En cuanto los franceses se quedan solos, el Viet Minh empieza la guerra de guerrillas, dando lugar a la Primera Guerra Indochina. Por otra parte, empezaba la guerra fría entre EEUU y Rusia.
En 1950 tenemos por una parte a Rusia y China que reconocen como legítima a la República Democrática de Vietnam, con capital en Hanoi, y por otro a los EEUU e Inglaterra reconociendo el Estado de Vietnam bajo poder francés y capital en Saigon. Simultáneamente, el resultado de la guerra de Korea hacía que los americanos se reafirmaran en sus suposiciones: la guerra en Indochina era un ejemplo de expansionismo comunista dirigido por Rusia.
Y así fue, como entre estas suposiciones y la de la teoría del dominó, en la que se creía que si un país de la región se volvía comunista el resto seguirían el mismo camino, los EEUU decidieron que el hecho de que Vietnam fuera un país liderado por comunistas era inaceptable. Veinte años después, 2 millones de personas muertas y un país con secuelas inevitables para las próximas generaciones… en Abril de 1976, tras la conquista de Saigon por parte del ejército nor-vietnamita, se reunifica el país. Saigon pasa a llamarse Ho Chi Minh City, y nace la República Socialista de Vietnam…
Entrada al museo, una colección de pequeños aviones de combate y tanques «dan la benvenida»
Aviones de guerra.
La mayoría de los aviones son del ejército americano, que dio la mayor parte de sus efectivos materiales al ejército sur-vietnamita mientras progresivamente se batía en retirada en los últimos años de la guerra.
Sorprende como estos aviones tan pequeños pueden causar tanto daño
Máquinas de muerte instaladas a bordo de un helicóptero
Creo que es la primera vez que veía un tanque de tan cerca…
Tanques y chinook.
Un chinook con el clásico doble helice. Enorme…
Armas de muerte…
Este es un tanque lanzallamas. Cuando uno piensa en un lanzallamas, se imagina un alcance de 10-15m, pero al ver las fotos de este bicho en acción… llega a 137m. Qué locura…
Tenéis alguna idea del alcance de este cañón? Haced una estimación, la respuesta en la próxima foto.
Guillotina… real como la vida misma 😦
Números del despliegue americano-francés durante la guerra del Vietnam
Balance entre la II Guerra Mundial, la de Korea, y la de Vietnam
Condena Tribunal Bertrand Russell.
De cuando Vietnam se convirtió en el laboratorio de los Estados Unidos. No he puesto ninguna imagen de la sala donde se ven los efectos del gas naranja, porque son tan horribles y monstruosas, que preferimos no guardar recuerdos de esa sala :_(
Foto del horror. Ni encuadré más ni recorto la foto a propósito. En ella se ven soldados estadounidenses con tres cabezas de vietnamitas sobre el suelo. Abajo a la izquierda, yace uno de los cuerpos decapitados
Foto del pánico… (continúa)
… pie de foto. Sin comentarios.
Una de las fotos más vistas de la guerra del Vietnam. Esta niña posteriormente escribió un libro «The Girl from the Picture», que junto a «Sorrows of War» son de los libros más recomendados para ilustrar esta guerra…
Resultado de la guerra: todos pierden.
Con esta tristeza y tratando de asimilar que cualquier persona que viéramos en el país de unos 55-60 años habría vivido esta terrible «guerra», iniciamos nuestro camino hacia el norte.
Compramos dos Banh Mi (ie, bocadillos) y continuamos!
Mientras su madre nos preparaba los bocatas, ella sólo quería que le hiciéramos fotos 😀
Qué arte!
Así son los «sleeping bus» de la compañía Sinh Tourist (la real, ojo que hay cientos de fakes por ahí)
El oso… a dormir!
Chao HCMC! Continuamos para seguir descubriendo y viviendo en primera persona las maravillas de Vietnam!
Siguiente parada Mui Ne, un pueblecito de pescadores encantador! Nos leemos el próximo domingo!